martes, 28 de agosto de 2012

ORBE


Todo es silencio y el mundo gira alrededor nuestro
no es ausencia de emociones, sino un nuevo cosmos que se abre
esta quietud me aclara  la inmensidad de tu amor.

Alucino mientras escucho la cadencia de tu corazón
con universos y planetas, con cielos y mares azules
es una reprimenda a mi compulsión por las palabras.

Nuestras diferencias se hacen pequeñas
y tus manos con las mías se confunden
siento tu calor y casi creo en finales felices.

Pero ni el planeta, ni el reloj se detiene
y tus besos y tus miradas
me recuerdan otra partida y el fin de este Nirvana.

Aún así no quiero quebrar este silencio que construimos
es nuestro secreto, nuestro refugio
es donde te espero, donde el amor se hace eterno.